Con este ejercicio te enseñaremos a fortalecer los músculos de la pelvis con la ayuda de un compañero.
No olvides consultar con tu médico sobre tu aptitud física antes de realizar el ejercicio.
El fortalecimiento de estos músculos, importantes en el equilibrio de la cadera y de la columna, te ayudará a prevenir y a corregir los dolores de espalda.
La actividad se compone de dos partes: la posición y el movimiento.
En primer lugar, veamos la posición.
Ponte de pie con las rodillas ligeramente dobladas y los pies juntos.
Apoya el brazo en el hombro de tu compañero.
Coloca la mano que queda libre en tu cintura.
Estira la columna.
Eleva la parte trasera de tu cabeza lo más alto posible, pega el mentón al pecho y mantén la vista al frente.
En segundo lugar, pasemos al movimiento.
Inspira.
Luego, levanta tu pierna exterior hacia el lado unos 45°.
Mantenla recta e intenta no apoyarte en tu compañero.
Mantén la posición durante 6 segundos mientras respiras hondo lentamente.
A continuación, relájate.
Descansa 15 segundos y haz de nuevo el ejercicio.
No olvides contraer tus abdominales.
Recuerda también mantener los hombros bajos y relajados.
A continuación, cambia de lado con tu compañero para realizar el mismo ejercicio con la otra pierna.
Para incrementar la dificultad, puedes probar a mantener la posición durante más tiempo o a aumentar la altura a la que subes la pierna.
¡Te toca!
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