DAR EL PECHO USANDO PEZONERAS

En este vídeo aprenderás a utilizar pezoneras, también conocidas como escudos mamarios, para dar de mamar.

Las pezoneras resultan útiles para las madres cuyos pezones no tienen una forma muy definida, por lo que sus bebés podrían experimentar dificultades aferrándose a ellos.

También se utilizan cuando el bebé aún es débil y se cansa intentando agarrarse al pecho, o cuando la leche no sale con facilidad.

En ocasiones se recomiendan en caso de fisuras en los pezones, pero deben considerarse como una solución únicamente temporal, mientras se corrige el origen del problema.

Para ajustar la pezonera: exprime un poco de leche y deja que quede en la punta.

El olor de la leche neutralizará el olor a plástico de la pezonera y hará que instintivamente el bebé intente agarrarse al pecho.

Humedece el borde de la pezonera que está en contacto con el pecho para facilitar su adhesión.

Asegúrate de que el pezón queda bien centrado.

Para que el bebé succione con eficiencia, debe tener la boca bien abierta y cubrir con ella la mayor parte de la areola, que es la zona oscura que rodea el pezón.

Al usar las pezoneras, se corre el riesgo de que disminuya la producción de leche. Por eso solo deben usarse temporalmente.

Para ello intenta darle el pecho a tu bebé sin la pezonera tan pronto como sea posible.

Por ejemplo, puedes usarla una vez cada dos comidas, o en un solo pecho en cada sesión.

Si tienes los pezones planos, puedes usar la pezonera solo al comienzo del período de lactancia y a continuación

Intentar enseñarle al bebé a agarrarse al pecho sin nada cuando el pezón se vuelva más flexible y esté más extendido.