La mecánica de las olas

Cuando pensamos en surf,

pensamos naturalmente en las olas.

Ya sean grandes, pequeñas, onduladas, huecas... las olas son un elemento esencial en la práctica del surf.

Pero, ¿de dónde vienen y cómo se forman?

En este vídeo, el primero de nuestro programa de surf, te hablamos sobre la mecánica de las olas: sus orígenes y sus especificidades.

La formación de las olas es esencialmente la consecuencia de un fenómeno meteorológico, el resultado de la interacción de la energía solar con el planeta Tierra.

Partiendo de este contexto, la formación y la mecánica de las olas están divididas en 3 partes; la transformación del calentamiento del sol en viento, la trasmisión de la energía del viento hacia el océano -que da lugar a las olas- y la dispersión de la energía de la ola cuando se rompe en la costa.

Al calentar la tierra, la energía solar produce un calentamiento desigual en el Ecuador con relación a los Polos, dando lugar a zonas con diferentes valores de temperatura y presión atmosférica en la superficie del planeta.

De esta diferencia nacen vientos y tempestades conocidos como 'depresiones'.

Al soplar con fuerza, sin duración e intensidad definidas, estos vientos y tempestades envían su energía hacia el océano. Una vez allí, esta energía se desplaza en forma de ondas, como cuando lanzamos una piedra en un lago.

A medida que estas olas de propagan, se organizan en series, según su tamaño y su velocidad.

Cuando alcanzan una profundidad media algo mayor a su tamaño (normalmente cuando se acercan a la costa), la base de la ola comienza a perder velocidad al chocar con el suelo.

La parte superior de la ola continúa desplazándose, hasta que la cresta pierde el equilibrio.

En ese momento, la onda rompe, liberando la energía que había acumulado desde la fase de calentamiento solar.

Según la inclinación del suelo y del fondo marino, la ola se romperá con más o menos fuerza. Este índice indicará si se puede o no surfear en una región determinada de la playa.

Al observar las olas romperse en la costa, podemos distinguir las fases de estas por las que el surfista pasa: la ondulación, donde la ola aún conserva su energía, la zona donde se rompe, liberando la energía y transformándose en paredes, crestas y espuma y finalmente, la zona de surf, donde se mezcla la espuma de varias olas que ya han roto.

Para aprender a practicar surf debemos aprender a leer el océano y las olas.

Tomarse el tiempo de observar, estudiar y experimentar las olas en la playa es el primer paso para comprender este deporte,