Cómo hacer una mariquita

Tomamos una hoja cuadrada y la doblamos.

Abrimos y plegamos sobre la línea central.

Hacemos lo mismo del otro lado.

A continuación, plegamos esta punta sobre la línea central.

Hacemos lo mismo del otro lado.

Debemos plegar esta parte hacia el interior.

Para eso abrimos, plegamos todo hacia el interior y volvemos a cerrar.

Hacemos lo mismo del otro lado.

Plegamos estas dos puntas hacia abajo.

Marcamos bien el pliegue.

Damos la vuelta a la hoja.

Debemos plegar la parte de abajo a la altura de estos dos extremos.

Ahora, plegamos la punta de arriba hacia abajo, de esta manera, al máximo.

Plegamos hacia arriba, dejando un pequeño espacio aquí.

Obtendremos esta forma.

Damos vuelta y plegamos esta punta sobre esta línea.

Levantamos estas dos puntas y plegamos este extremo.

El pliegue debe estar paralelo al pliegue del medio, pero debemos dejar un espacio del tamaño de un dedo, aproximadamente.

Hacemos lo mismo del otro lado, de la forma más precisa posible.

Ahora, plegamos esta punta siguiendo bien esta línea.

Abrimos y plegamos en el sentido contrario, siempre siguiendo la misma línea.

Ahora, plegamos de los dos lados al mismo tiempo, así, lo que nos permitirá obtener una de las patas.

Hacemos lo mismo del otro lado.

Plegamos esta punta hacia abajo, a partir de esta intersección.

El pliegue debe estar en total continuidad.

Luego, hacemos lo mismo del otro lado.